miércoles, 11 de abril de 2007

(continuacion de muescas)
EL UNIFORME


Tu verás, si quieres apuntarte a la academia, apúntate, pero a ver como nos apañamos para atender a la niña; aquella muchacha escuchaba a su marido, con la mirada baja, ella sabía que tenia razón, entre el trabajo y cuidar de su hija, el tiempo que la quedaba libre era muy poco, su marido disponía igual que ella de poco tiempo libre, tendría que buscar a alguien que cuidara de la niña y pagarla, pagar la academia ya sería un sacrificio, tantos gastos casi eran imposibles de soportar.
El tiempo paso para ella, la edad de entrar en la academia de policía caduco.
Las ilusiones de llevar aquel uniforme, pertenecer a un cuerpo, llevar sus sueños al tablero de la realidad, todo eso quedo clavado en lo mas profundo de su corazón.
Recordaba con anhelo la fotografía de su abuelo paterno, vestido con el uniforme de policía local; en tiempos de guerra fue trasladado a un pueblo de Alicante, con él se marchó la familia, su mujer y sus dos hijos.
En sus estancias y veraneos en aquel pueblo, la gente del lugar siempre la recordaban el papel que su abuelo representó en aquel lugar.
Fue el único miembro de su familia que vistió uniforme, pero ella siempre pensaba que su abuelo algo la traspasó de su amor por aquel ropaje, su significado e idealismo y aunque no pudo entrar en la academia, ella se prometió, que algún día vestiría de uniforme.



CONTINUARA
MUESCAS
(CADA UNO TENEMOS LAS NUESTRAS)







Buscar una frase adecuada es difícil, normalmente, no es necesario buscar ninguna, para un escritor la primera frase es el nacimiento de su relato, por lo tanto, la primera frase ya estaba formada sin saberlo, cuando comienza su escritura; acto que en este escrito no ocurre.
En este documento van a florecer ideas y sentimientos muy difíciles de explicar, en esta historia no existe un principio, todo va enlazado y trenzado según los acontecimientos que fueron uniendo los sucesos, sucesos recientes tienen causas en épocas anteriores y algunas ya lejanas tienen sentido en el tiempo actual.
Así que cualquier comienzo es bueno, esta historia no necesita mantener su fidelidad a un principio, ya que ese principio no existe.

CONTINUARA

lunes, 2 de abril de 2007


CANTABA LA LUNA



Desde que el universo existe, la reina de la noche, ama al rey del día y desde su trono le dice con lágrimas secas:
"Cuando nazco tú te escondes, me esquivas hiriente y si creo que te tengo, tras montañas duermes".
La reina con tristeza miraba a las estrellas y con corazón afligido, cantaba su pena:
"Yo reina de la noche, tu rey del día, amores separados, amor de luz divina".
Un día la reina no pudo contener su deseo de tenerle cerca y con toda su furia, entró en el reino del día, nublo con su cuerpo al amado y este, la despreció con descaro, regresó con tristeza del destierro, todavía canta la reina, todavía canta la estrella:
"Calor que me abraza, amor que no me llega, si consigo alcanzarte, tú me destierras".