Ya estamos en Navidades, y llegan las buenas nuevas,¿cuales?, no se, pero seguro que alguna hay, aunque cierto es, que segun todos la crisis nos afecta, gastamos menos, nos relacionamos menos,(asi no gastamos), tanto es, que por el Hostal-bar de nombre extranjero, ya no te encuentras a muchos de sus clientes, curioso detalle.
Al que tiempo hace que no se deja caer por alli, es el corredor de seguros apodado en tiempos de su juventud como "manolio", apodo que a un haevy no le va mucho, pero la vida es así.
Haevy en su interior, señor de corbata en el mundo laboral y gustador de encuentros con amigos, raro se me hace no verle, pues fiel a su cita de los fines de semana, su hueco vacio se encuentra, desde aqui un saludo y que usted este bien, señor "manolio".
Los que no evitan su cita son los de siempre, EL CANO, EL MORENO, EL SEÑOR TAXISTA Y ESPOSA, SEÑOR BARROSO, LA VECINA, TU DIMEE, NO ME DIGAS MÁS Y EL FUMETA que a falta de entrar en el recinto, pasa litrona en mano y te hecha saludo pasante.
Pero estos menesteres de poca importancia no significan que la vida no siga y por supuesto, ultimas noticias sobre la boda:
¡¡YA NO HAY BODA!!
Ya, Ya lo sé, es un contratiempo, pero resulta que la vecina a ligao, a ver, era normal tantos hombres alrededor... ella no a podido esperar y.. en las garras de un hombre, segun ella, joven (yo no le conozco) y como la vecina reconoce, las necesidades hay que cubrirlas, pues nada que por lo visto hablo con el perjudicado, el cual dijo:
..y yo esperando ansioso la boda, despues de tantos años, viene el jovenzuelo y se la lleva ¡¡tu dime!!.... ponme un cubata.
Y con cubata en mano y la brasileña agarrada a su brazo, se fue de juerga, pa quitarse la pena tan grande, tu dime.
Y esta es la noticia que nos trae la crisis, aunque espero que en estos dias próximos, seamos capaces de olvidarnos de esta cruz, y pasarnos buenas fiestas acompañados de todos los degustadores de licores y de los dueños de este hostal-bar con nombre extrajero que tantos buenos ratos nos hace pasar.
!!FELICES FIESTAS¡¡
OS DESEAMOS SEÑOR TAXISTA Y SEÑORA(PA SERVIR)
domingo, 14 de diciembre de 2008
jueves, 13 de noviembre de 2008
YA NO RECUERDO CUANDO ME FUI ( dimes y diretes) 7º
!!!Tenemos buena-nueva¡¡¡, segun diretes y más dimes, nos vamos de boda.
Mira tu por donde salió la vecina, novio suplicante llevaba en el bolsillo y sorpresa nocturna nos dió, pues no va y me sorprende a mí (mujer del taxista, "pa servir"), con la grata noticia de su boda en primavera.
No mas, pues tú dime, que boca se me abrió, pues hace dos días lloraba por esquinas la perdida del novio, que con la "jenny" sa ido, dejando a todos pensando "¿que abra pasao?", y va la vecina y dice que se casa.
Aunque con unas cervezas de compañia y buen coloquio, en el bar del hostal se confesó, resulta que el "tú dime" amigo del "no me digas más", está que se muere por sus huesos, desde que su juventud puso en evidencia sus tributos, ya la tanteaba desde antes de casarse con el que fue padre de sus hijos, despues cuando se separó rondó un poco, pero sin cansarse, ni sudar y ahora a las puertas de la inevitable jubilación y ya ganas de descanso (en paz) "tú dime", va el maromo y la pide matrimonio, aunque a su vera todavia lleve del brazo(como as guardado en la manga) a la chiquilla brasileña, que le hizo discutir con su amigo, por si era suya o de él, "tú dime" .
Aunque sin decir tiene, que la vecina alardea muy bien de sus gracías y cuenta toda llena de orgullo que hombres la rondan por doquier, ¿que tendra la vecina?, que ni la Presley se los lleva igual, hasta e oido decir que el "Cano" tiró algun tejo por si colaba, "no me digas más" .
Por lo que se ve, la parejita tiene algo en común, derrochan sexa-pill, asi que la boda sera una catarata desbocada de flujo de amor y pasión, "tú dimeee".
"QUE VAMOS DE BODAAAAAAAAAAAA"
Mira tu por donde salió la vecina, novio suplicante llevaba en el bolsillo y sorpresa nocturna nos dió, pues no va y me sorprende a mí (mujer del taxista, "pa servir"), con la grata noticia de su boda en primavera.
No mas, pues tú dime, que boca se me abrió, pues hace dos días lloraba por esquinas la perdida del novio, que con la "jenny" sa ido, dejando a todos pensando "¿que abra pasao?", y va la vecina y dice que se casa.
Aunque con unas cervezas de compañia y buen coloquio, en el bar del hostal se confesó, resulta que el "tú dime" amigo del "no me digas más", está que se muere por sus huesos, desde que su juventud puso en evidencia sus tributos, ya la tanteaba desde antes de casarse con el que fue padre de sus hijos, despues cuando se separó rondó un poco, pero sin cansarse, ni sudar y ahora a las puertas de la inevitable jubilación y ya ganas de descanso (en paz) "tú dime", va el maromo y la pide matrimonio, aunque a su vera todavia lleve del brazo(como as guardado en la manga) a la chiquilla brasileña, que le hizo discutir con su amigo, por si era suya o de él, "tú dime" .
Aunque sin decir tiene, que la vecina alardea muy bien de sus gracías y cuenta toda llena de orgullo que hombres la rondan por doquier, ¿que tendra la vecina?, que ni la Presley se los lleva igual, hasta e oido decir que el "Cano" tiró algun tejo por si colaba, "no me digas más" .
Por lo que se ve, la parejita tiene algo en común, derrochan sexa-pill, asi que la boda sera una catarata desbocada de flujo de amor y pasión, "tú dimeee".
"QUE VAMOS DE BODAAAAAAAAAAAA"
jueves, 16 de octubre de 2008
YA NO RECUERDO CUANDO ME FUI ( dimes y diretes) 6º
Naranjos, ver. 18 de julio año 2006.– miembros de la logia masónica simbólica “Melchor Ocampo núm.29”, se dieron cita en el hemiciclo a Juárez, ubicado en el parque “constitución”, frente al palacio municipal de este lugar, donde llevaron una ofrenda florar e hicieron guardia de honor, para recordar el 134 aniversario del fallecimiento del benemérito de las Américas lic. Don Benito Juárez García.
El orador de esta ceremonia fue "EL CANO", quien entre otras cosas dijo que: “...hay algunos a los que el tiempo, no demerita su perfil histórico, Juárez pertenece sin duda a esta casta privilegiada de inmortales. Porque su grandeza es evidente. Porque fue factor indispensable en la creación de nuestra nacionalidad. Lo dijo Pellicer, el poeta tabasqueño: Juárez seguirá siendo el presidente vitalicio de México”.
miércoles, 15 de octubre de 2008
YA NO RECUERDO CUANDO ME FUI (dimes y diretes) 5º
Entre dimes y diretes, piernas y bastones, se mueve la movida de los jubilados inquilinos, hospedados y fijos.
Por una cama, avalada por el cano, para la anciana jubilada, que ya los noventa corre, aunque en mercado sigue pues sus lindezas airea el moreno con orgullo y desparpajo.
Dice el cano que engañado a sido, pues aval a prestado, sin cargos ni recargos, tan creido estaba, que cuando vio las letras comenzó su retaila.
Si la sesta parte de la tercera parte es igual al total de las cuartas partes, ¡¡no me salen las cuentas¡¡, por lo que, si yo pago la primera parte de las sestas partes tiene que ser el total de las quintas partes, ¡¡ joder¡ que no sale.
Y mientras el cano se dirige a quejarse a la tienda en cuestión, la novia del moreno, se queja al soltero regente, de celos que la propina las sirvientas, que acuden a limpiar sus impurezas, y con agrado les tratan y ella novia jubilada con celos paga.
Por una cama, avalada por el cano, para la anciana jubilada, que ya los noventa corre, aunque en mercado sigue pues sus lindezas airea el moreno con orgullo y desparpajo.
Dice el cano que engañado a sido, pues aval a prestado, sin cargos ni recargos, tan creido estaba, que cuando vio las letras comenzó su retaila.
Si la sesta parte de la tercera parte es igual al total de las cuartas partes, ¡¡no me salen las cuentas¡¡, por lo que, si yo pago la primera parte de las sestas partes tiene que ser el total de las quintas partes, ¡¡ joder¡ que no sale.
Y mientras el cano se dirige a quejarse a la tienda en cuestión, la novia del moreno, se queja al soltero regente, de celos que la propina las sirvientas, que acuden a limpiar sus impurezas, y con agrado les tratan y ella novia jubilada con celos paga.
lunes, 13 de octubre de 2008
YA NO RECUERDO CUANDO ME FUI ( dimes y diretes) 5º
HOMENAJE A LA VILLA DE LA QUE HABLO
Madrid, dirección Sureste; los campos se abren una vez que cruzas la frontera de la ciudad, el cielo despejado de la boina negra que cubre la urbe, te regala paisajes iluminados de sensible claridad.
Siguiendo viaje descubres alfombras verdes de huertas fértiles, hortelanos escondidos en sus granjas, cuidan la salud de sus tierras.
Un olor fresco y dulce, te acompaña hasta la Vega del rió Jarama, que saluda raudo por su paso, arropado por los campos sembrados, con matemática maestría.
Pinares, encinas, olmos, helechos, distintas vegetaciones, dan aroma a sus aires, la mínima brisa produce, sensación de aplauso en sus hojas, que aparecen altas, estiradas, como intentando llegar al techo más alto, el cielo de Mejorada del Campo.
Y así, el medio natural de esta Villa, se presenta al viajante, haciendo caso omiso a la batalla urbana que se cierne a pocos kilómetros de su ubicaje.
Guarda entre sus calles un gran pasado histórico, hogar de Marqueses y Reyes, honorables que hicieron evolucionar su nombre de recién nacido “Mejorada del Rey”, concediéndole titulo de “Villa Realenga” madurando, como fruto de tierra, a consecuencia de acontecimientos ocurridos, pasó a ser llamada ”Mejorada del Campo”.
Aloja en sus entrañas, edificios emblemáticos, “La Iglesia de San Fausto”, “La Casa Grande”, “La Catedral de Justo”, todos ellos con paredes llenas de historia, que al posar la mirada en ellas, dejan ver la cultura, grabados y leyendas que alojan sus muros.
Hospitalarios, alegres, solidarios, así son sus gentes, llenan las calles dando vida a este pueblo, del llamado Corredor del Henares.
Sus calles, todavía guardando su arte rústico del lugar, invitan al paseo, su actividad fluye energía, despertando esperanza de continuidad, en este pequeño pueblo, en esta pequeña y bella Villa, al Sureste de Madrid.
jueves, 9 de octubre de 2008
YA NO RECUERDO CUANDO ME FUI (dimes y diretes) 4º
Varios días a la semana, el taxista y esposa("pa servir"), se toman su aperitivo en el bar en cuestión, el motero les deleita con las nuevas novedades, noticias y cotilleos que con risas y mofas acompañan los aperitivos que calman los estomagos sonantes de los conductores, el soltero regente despacha las mesas con sus ademanes sonantes, dando prisa a los comensales (pues no estamos pa perder el tiempo).
Gratamente les amena con su visita el Señor Barroso, empresario de carreteras, trabajador como el que más, amigo de sus amigos y de los demás tambien, jefe de buenas migas, no por ser extremeño, sino por quehacer bien con trabajadores, soñador de altos vuelos, y que tiene unas morcillas y chorizos de su pueblo que quitan el sentio, buen bebedor y mejor comensal, el Señor Barroso, con su muleta a cuestas, trabaja, come, bebe y disfruta la vida, !!muy bien Señor Barroso, muy bien¡¡
Gratamente les amena con su visita el Señor Barroso, empresario de carreteras, trabajador como el que más, amigo de sus amigos y de los demás tambien, jefe de buenas migas, no por ser extremeño, sino por quehacer bien con trabajadores, soñador de altos vuelos, y que tiene unas morcillas y chorizos de su pueblo que quitan el sentio, buen bebedor y mejor comensal, el Señor Barroso, con su muleta a cuestas, trabaja, come, bebe y disfruta la vida, !!muy bien Señor Barroso, muy bien¡¡
lunes, 6 de octubre de 2008
YA NO RECUERDO CUANDO ME FUI ( dimes y diretes) 3º
La barra de dicho bar acoge, sobre todo los domingos, a amigos de los regentes, alguna comida o cena organizan, siempre con grandes finales, algunos pasan a cotilleos de portera y otros quedan guardados por incluir parte de la íntimidad de los protagonistas.
No puedo dejar sin nombrar a dos de ellos, no son iguales, pero si los miras bien, casi, casi, les sacas semejanza, pelo casi blanco los dos, ojos claros los dos, tripita de felicidad les acompaña, los dos dueños de bar, los dos sin compromiso, a ninguno se le entiende, sino es por una cosa es por otra, uno dice "tú dime" el otro "no me digas más".
"tú dime" le gusta la noche, baila poco, pero se le oye, "no me digas más" sus buenas comidas, que con esmero prepara, pues de madrugada en la cocina ya le ves trajinando, que solo el mandíl y el sombrero le falta, para ser el "Arguiñano".
No hace mucho, picadillos estuvieron por unas faldas, que al final la historia creo que nadie sabe, ni como fué, ni como va, ni si acabo, el caso es que en rumores de barra se decia que picados estaban, pero lo cierto es que yo los e visto tomando juntos unas cañas.
Es fácil encontrar en el fin de semana a vecinos del edificio, entre ellos "la vecina" que los sábados tras traer el carro arrastrando, reposa el tormento de la semana y la compra, tras esa barra con botellín en mano y berborrea de trabajo, con ella muchas veces nos hemos juntado (taxista y esposa, "pa servir") y la hora de la siesta hemos cumplido botellín tras botellín.
Hay veces que a nosotros se une el vecino del cuarto, que tras un traje de pintor de brocha gorda nos regala sus historias increibles aunque ciertas, que le ocurren tras juergas de botellón, cigarrillos mezclados y cuelge natural que Dios le a dado.
Cierto día apareció, cuando el bar más lleno estaba, con una servilleta envuelta en un nudo, se la entregó al regente motero, pidiendo en consecuencia una jarra de cerveza, que cara pondría el de las dos ruedas, al ver el contenido de la servilleta, centimos de euro contenia el babero, sus orejas hechaban más humo que su tubo de escape, sus ojos más luz que un foco y su boca desencajada gritó sin pensar:
-estás tonto?, te crees que me voy a poner a contar esta chatarra?
-pero si es dinero¡, incrédulo contestaba el fumero
-!!que no te pongo la jarra¡¡, !!yo no cuento esto ahora¡¡
-será posible? decia el otro dentro de su razón.
Entre risas de todos y cabreo del motero nos pusimos a contar la chatarra, que al final no tuvo que entregar, porque terminó, como es habitual, borracho e invitado.
No puedo dejar sin nombrar a dos de ellos, no son iguales, pero si los miras bien, casi, casi, les sacas semejanza, pelo casi blanco los dos, ojos claros los dos, tripita de felicidad les acompaña, los dos dueños de bar, los dos sin compromiso, a ninguno se le entiende, sino es por una cosa es por otra, uno dice "tú dime" el otro "no me digas más".
"tú dime" le gusta la noche, baila poco, pero se le oye, "no me digas más" sus buenas comidas, que con esmero prepara, pues de madrugada en la cocina ya le ves trajinando, que solo el mandíl y el sombrero le falta, para ser el "Arguiñano".
No hace mucho, picadillos estuvieron por unas faldas, que al final la historia creo que nadie sabe, ni como fué, ni como va, ni si acabo, el caso es que en rumores de barra se decia que picados estaban, pero lo cierto es que yo los e visto tomando juntos unas cañas.
Es fácil encontrar en el fin de semana a vecinos del edificio, entre ellos "la vecina" que los sábados tras traer el carro arrastrando, reposa el tormento de la semana y la compra, tras esa barra con botellín en mano y berborrea de trabajo, con ella muchas veces nos hemos juntado (taxista y esposa, "pa servir") y la hora de la siesta hemos cumplido botellín tras botellín.
Hay veces que a nosotros se une el vecino del cuarto, que tras un traje de pintor de brocha gorda nos regala sus historias increibles aunque ciertas, que le ocurren tras juergas de botellón, cigarrillos mezclados y cuelge natural que Dios le a dado.
Cierto día apareció, cuando el bar más lleno estaba, con una servilleta envuelta en un nudo, se la entregó al regente motero, pidiendo en consecuencia una jarra de cerveza, que cara pondría el de las dos ruedas, al ver el contenido de la servilleta, centimos de euro contenia el babero, sus orejas hechaban más humo que su tubo de escape, sus ojos más luz que un foco y su boca desencajada gritó sin pensar:
-estás tonto?, te crees que me voy a poner a contar esta chatarra?
-pero si es dinero¡, incrédulo contestaba el fumero
-!!que no te pongo la jarra¡¡, !!yo no cuento esto ahora¡¡
-será posible? decia el otro dentro de su razón.
Entre risas de todos y cabreo del motero nos pusimos a contar la chatarra, que al final no tuvo que entregar, porque terminó, como es habitual, borracho e invitado.
sábado, 4 de octubre de 2008
YA NO RECUERDO CUANDO ME FUI (dimes y diretes) 2º
En aquel bloque al que fui a caer, bajo sus pies ubicado se encontraba el bar de un hostal conocido en la zona, con nombre extranjero su dueño lo bautizó, pensando quizás que asi se daria mejor a conocer, de hecho sus habitaciones se encuentran en el mismo edificio, asi que de hablar de ellas, es lo mas normal, utilizadas por gentes de empresas, como de ciudadanos del lugar, para noches de "caiditas de roma", resacas, refugio y cosas varias.
En este momento lo regentan los hijos de los dueños, son tres, como en los cuentos de niños que se habla de mayores; ninguno igual, desparejos por donde los mires, uno casado, empresario de la construción, que pone las cañas siempre que es necesario, otro tambien casado, motero fustrado y camarero porque tuvo que ser asi, (es lo que hay), el tercero soltero, juergista y dirigente del hostal, (y si te gusta bien y sino ya sabes...)
Tienen habitaciones en otra calle cercana, ocupada por divorciados ya jubilados y por tanto metidos en lios siempre que pueden ( parece ser que sino se aburren) de los que algunas veces los lios, superan los peldaños del cuartel de la Guardia Civil.
Son dos los mas guerreros, los dos delgaditos, enfermos de las piernas ( uno usa bastón, el otro no) separados, aunque hay que aclarar que su familia les adora, uno un tanto mujeriego de hecho comparte con jubilada el otro dice que no..., el dinero nunca les falta, (o lo tienen o lo piden), nunca han hecho nada, pero siempre pasa algo en lo que esten involucrados, uno moreno, el otro pelo cano, el moreno mas callado y de vez en cuando perdido, lo mismo de sentido que de sitio, "el cano" todos los dias con juego de maquinas, copitas y algun direte acompaña sus jornadas solitarias, no por menos hace poco, con peleas por una copa, fue protagonista de unos cuantos dias en el bar de aquel hostal, que con ojo morado y dignidad pisada, escuchamos sus quejas tras los botellines pagados por soliradidad confusa y algo de rollo que se tiro "el cano" con todos.
Pero los buenos momentos son cuando le toca la máquina, contento como un chiquillo, recoje sus monedas, las cuenta, las coloca con mimo(casi las besa), llega el "soltero" y con voz initeligible, ronca y mirada fija, le dice: " ya sale, ya sale...", hay que ver la cara de "el cano" cuando el regente coge las monedas y recupera la parte o terceras partes que son suyas, desde el principio y se lo lleva a la caja de donde salieron, refunfuñando y diciendo " no hay más, no hay más...)
En este momento lo regentan los hijos de los dueños, son tres, como en los cuentos de niños que se habla de mayores; ninguno igual, desparejos por donde los mires, uno casado, empresario de la construción, que pone las cañas siempre que es necesario, otro tambien casado, motero fustrado y camarero porque tuvo que ser asi, (es lo que hay), el tercero soltero, juergista y dirigente del hostal, (y si te gusta bien y sino ya sabes...)
Tienen habitaciones en otra calle cercana, ocupada por divorciados ya jubilados y por tanto metidos en lios siempre que pueden ( parece ser que sino se aburren) de los que algunas veces los lios, superan los peldaños del cuartel de la Guardia Civil.
Son dos los mas guerreros, los dos delgaditos, enfermos de las piernas ( uno usa bastón, el otro no) separados, aunque hay que aclarar que su familia les adora, uno un tanto mujeriego de hecho comparte con jubilada el otro dice que no..., el dinero nunca les falta, (o lo tienen o lo piden), nunca han hecho nada, pero siempre pasa algo en lo que esten involucrados, uno moreno, el otro pelo cano, el moreno mas callado y de vez en cuando perdido, lo mismo de sentido que de sitio, "el cano" todos los dias con juego de maquinas, copitas y algun direte acompaña sus jornadas solitarias, no por menos hace poco, con peleas por una copa, fue protagonista de unos cuantos dias en el bar de aquel hostal, que con ojo morado y dignidad pisada, escuchamos sus quejas tras los botellines pagados por soliradidad confusa y algo de rollo que se tiro "el cano" con todos.
Pero los buenos momentos son cuando le toca la máquina, contento como un chiquillo, recoje sus monedas, las cuenta, las coloca con mimo(casi las besa), llega el "soltero" y con voz initeligible, ronca y mirada fija, le dice: " ya sale, ya sale...", hay que ver la cara de "el cano" cuando el regente coge las monedas y recupera la parte o terceras partes que son suyas, desde el principio y se lo lleva a la caja de donde salieron, refunfuñando y diciendo " no hay más, no hay más...)
martes, 30 de septiembre de 2008
YA NO RECUERDO CUANDO ME FUI ( dimes y diretes)
Creo que fué un verano, una tarde sin acabar, un guiso medio cocinado, una plancha encendida, el niño medio llorando por un caramelo no comprado, creo que fué esa tarde cuando lo dije y lo cumpli; !!yo me voy de este Madrid¡¡, !!yo no aguanto más este Madrid¡¡
Y como ahora e de contaros, del Madrid de los noventa salí, poniendo pies en polvorosa y sin irme muy lejos ( no fuera a perderme) a quince kilometros caí.
Ya sin rimas ni diretes, espero contaros claro y conciso, la historia que no esperaba nunca contar, pues si mi intención de salir por patas, era tener tranquilidad e intimidad, nunca a sido conseguida, pues todos los dias cuando no protagonizo yo historia, historieta cercana me cuentan, de la Rue donde vivo.
Miembro de Institucion, en eso me convertí, por tanto conocida más de lo deseado, unicos taxistas en el bloque enumerado ( mi marido y yo, pa servir), Municipio "pequeño", antiguo y no por menos casi todos familia, con rencillas antiguas, deberes no acabados, recuerdos no borrados y mas cuentas pendientes que en Hacienda, todos los dias algo de lo que "no" hablar, este es el dia a dia, de aquel lugar cuyo nombre ya no importa, en un lugar del Noroeste de Madrid, que si a de ser, los nombres no iran a personajes reales, pero si sus perfiles y por tanto sus personalidades....
Y como ahora e de contaros, del Madrid de los noventa salí, poniendo pies en polvorosa y sin irme muy lejos ( no fuera a perderme) a quince kilometros caí.
Ya sin rimas ni diretes, espero contaros claro y conciso, la historia que no esperaba nunca contar, pues si mi intención de salir por patas, era tener tranquilidad e intimidad, nunca a sido conseguida, pues todos los dias cuando no protagonizo yo historia, historieta cercana me cuentan, de la Rue donde vivo.
Miembro de Institucion, en eso me convertí, por tanto conocida más de lo deseado, unicos taxistas en el bloque enumerado ( mi marido y yo, pa servir), Municipio "pequeño", antiguo y no por menos casi todos familia, con rencillas antiguas, deberes no acabados, recuerdos no borrados y mas cuentas pendientes que en Hacienda, todos los dias algo de lo que "no" hablar, este es el dia a dia, de aquel lugar cuyo nombre ya no importa, en un lugar del Noroeste de Madrid, que si a de ser, los nombres no iran a personajes reales, pero si sus perfiles y por tanto sus personalidades....
jueves, 1 de mayo de 2008
PAN CON MANTEQUILLA......
....con aceite y pimenton, con tomate y con chocolate... con todo loque puedas untar, como untar los recuerdos de los momentos de juegos, de riñas, de buenos amigos que nunca olvidas, es uno de los mejores placeres, saborear las imagenes untadas en tu cerebro y disfrutar, disfrutar, disfrutar....
Creo que cuando llegue a la vejez, podre sentarme en un butacon, mirar tras la ventana y poder saborear los sabores de los mejores momentos vividos.
No podre olvidar mi primer dia de colegio, el miedo que senti, recuerdo que no llore, solo miraba a todos los niños que estaban alli y una profesora, altisima con voz muy ronca y alta me cogio de una mano y no me solto en todo el dia, el miedo fue lo que quedo en mi recuerdo.
Creo que cuando llegue a la vejez, podre sentarme en un butacon, mirar tras la ventana y poder saborear los sabores de los mejores momentos vividos.
No podre olvidar mi primer dia de colegio, el miedo que senti, recuerdo que no llore, solo miraba a todos los niños que estaban alli y una profesora, altisima con voz muy ronca y alta me cogio de una mano y no me solto en todo el dia, el miedo fue lo que quedo en mi recuerdo.
domingo, 9 de marzo de 2008
UN HOMBRE PEGADO A UNA MANGUERA
Nunca pude saber si era el hombre el que estaba pegado a la manguera, o si fué la manguera la que se pegó a él.
Sus ojos eran de verde intenso, su sonrisa despegada de la cara, su perfil olvidado en el tiempo, sus rasgos eran difíciles de recordar, porque lo único que destacaba de él, era su manguera.
La llevaba pegada en su espalda como mochila infantil de escursión, agarrada a él como si de una serpiente enroscada se tratase, caminaba decidido y altivo por la ciudad.
Sus relaciones amistosas eran casi desconocidas, ya que su relación con la manguera, había causado muchos altercados entre las personas.
Si alguien decia que el día estaba caluroso, él sin dudarlo le enchufaba con la manguera, si en el restaurante la comida picaba y la gente se quejaba de ardor, enchufaba con la manguera, cuando en un bar tomaba café y alguien encendia un cigarro, su manguera manaba agua a doquier, sin que decir, que al grito de fuego su manguera parecía crecer y manar agua como gran depósito sin final.
Lo peor fué cuando alguien comentó que había una muchacha enamorada de aquel personaje, que todo el mundo conocía como el hombre de la manguera, aquella noticia llegó a sus oidos y el calor de la pasón se apoderó de él, su cuerpo manaba fuego incandescente al pensar que una joven podria dedicar sus sueños dulces y sensibles a una persona tan poco conocida y valorada en la ciudad, aquel calor se apoderó de él y la manguera empezó a regar, desde sus pies hasta su propia cabeza, con lo cual no dejaba de estar mojado y sucio, atrapado en su propia humedad que le impedia conocer a la bella muchacha.
En vano intentó dehacerse de la manguera, era imposible quitarsela de encima, su sufrimiento era tal que sus ojos no dejaban de manar lágrimas.
Nunca pudo conocer a aquella joven, nunca supo si era cierto que hubiera alguien enamorado de él, pues su calor fue apagado de tal forma que aunque pudo dehacerse de la manguera, jamas el calor del amor le volvió a manar de su piel.
Sus ojos eran de verde intenso, su sonrisa despegada de la cara, su perfil olvidado en el tiempo, sus rasgos eran difíciles de recordar, porque lo único que destacaba de él, era su manguera.
La llevaba pegada en su espalda como mochila infantil de escursión, agarrada a él como si de una serpiente enroscada se tratase, caminaba decidido y altivo por la ciudad.
Sus relaciones amistosas eran casi desconocidas, ya que su relación con la manguera, había causado muchos altercados entre las personas.
Si alguien decia que el día estaba caluroso, él sin dudarlo le enchufaba con la manguera, si en el restaurante la comida picaba y la gente se quejaba de ardor, enchufaba con la manguera, cuando en un bar tomaba café y alguien encendia un cigarro, su manguera manaba agua a doquier, sin que decir, que al grito de fuego su manguera parecía crecer y manar agua como gran depósito sin final.
Lo peor fué cuando alguien comentó que había una muchacha enamorada de aquel personaje, que todo el mundo conocía como el hombre de la manguera, aquella noticia llegó a sus oidos y el calor de la pasón se apoderó de él, su cuerpo manaba fuego incandescente al pensar que una joven podria dedicar sus sueños dulces y sensibles a una persona tan poco conocida y valorada en la ciudad, aquel calor se apoderó de él y la manguera empezó a regar, desde sus pies hasta su propia cabeza, con lo cual no dejaba de estar mojado y sucio, atrapado en su propia humedad que le impedia conocer a la bella muchacha.
En vano intentó dehacerse de la manguera, era imposible quitarsela de encima, su sufrimiento era tal que sus ojos no dejaban de manar lágrimas.
Nunca pudo conocer a aquella joven, nunca supo si era cierto que hubiera alguien enamorado de él, pues su calor fue apagado de tal forma que aunque pudo dehacerse de la manguera, jamas el calor del amor le volvió a manar de su piel.
lunes, 25 de febrero de 2008
HISTORIAS CERVECERAS
HISTORIAS CERVECERAS….(EL BOTÓN)
CRIS- Maria se abrió el botón, él quedo paralizado, no sabía que hacer
MAXI- Él pensó que quería que hiciese y él se abrió su botón
CRIS- Al abrirlo, se rompió, y sus pantalones cayeron, Maria soltó una gran carcajada
MAXI- Qué es lo que veía que Maria se quedó tan sorprendida que?...
CRIS- Se desmayó… al despertar dijo: Bendito sea¡, único en su especie, decide tú, dinero o mío
MAXI- El placer que sentí, que quede dormida. Porque aunque el dinero no hace la felicidad, ahí queda esa noche en la que me quede dormida y a la mañana de despertar me hice yo esa pregunta
CRIS- Si fue un sueño, que se repita, si fue realidad, que exista. Ese botón marcó mi vida, ese botón abrió mis puertas.
Estaba sola pensando que pudo ser cuando… la puerta se abrió
MAXI-Y apareció el botón, desperté del sueño que me envolvió y al despertar me encontré… con el muchacho que me invitó a una copa
CRIS- Dormía vestido con su botón desabrochado, todo fue una ilusión, como siempre, aunque… acompañada estaba sola
MAXI- Y pensando pude ahondar en mi memoria y descubrir la sensación de aquel botón
CRIS- Ese día marcó mi vida.
Una noche de invierno después de cenar con unos amigos, en la parada del autobús, un hombre, rubio, con ojos azules, alto, me dijo con voz cálida, abróchate, cogeras frio
MAXI- Y le dije: no soy rubio, ni con ojos azules, soy moreno, con ojos marrones y con fuerte personalidad y con el botón caído, que…
CRIS- En cuanto me dejes, sacaré a flote tus deseos, abriré tu mente, saciaré tus ilusiones y colmaré tus deseos
MAXI- Mis deseos son a veces fundados, no me quieras confundirme con mis sueños, aunque los hay vanos, no quita de reportarme un poco de felicidad e ilusión por vivirlos, alguna vez en la vida.
Los sueños si son compartidos, mucho mejor, vivir la alegría de la vida, el sentir, es saber que estas vivo, el aprender no ocupa lugar, en esta vida, porque siempre se aprende algo nuevo, y si miras el botón puedes encontrar…
CRIS- Tus miedos, tus inquietudes, ese botón puede ser una verdad, el miedo a ser tú, el miedo a que te conozcan y no hay más, ese eres tú…VIVIR, SENTIR, TOCAR, PALPAR, dame un minuto, tus sueños y los míos son uno.
Sueña y vive, vive y siente y aprende, da igual, ojos azules, cielos negros, mares amarillos, tierras fértiles, VIVE.
Mira el botón, está abierto, dime que quieres, es tu deseo
MAXI- Y hay estoy yo… con mis miedos e inquietudes, que a cada uno nos afectan y no a todos por igual… aprender a vivir de igual manera que…
Cuando miras el botón, sientes un deseo de…
CRIS- ¿De qué? ¿De romper con todo? ¿Rasgar el botón?
El botón es una metáfora, el botón eres tú…
viernes, 22 de febrero de 2008
RAIMUNDO
“RAIMUNDO”
Raimundo miraba el parte de entregas del día, después de repasarlo, se lo guardó en el bolsillo y se dirigió a coger las dos bombonas que tenía que entregar, una se la echó al hombro y la otra la agarró con su mano izquierda; con paso rápido fue hacia el portal; al llegar soltó la bombona y llamó al timbre del 2º-izq.
-Sí –le contestaron
-El butanero –dijo
Se oyó el timbre de apertura de la puerta, entró y subió las escaleras; no había ascensor. Cuando llegó en el rellano le esperaba una mujer rubia con bata de seda azul, fumaba un cigarro, muy maquillada y, con sonrisa lasciva, le miró de arriba abajo y con el dedo le indicó que pasara, tras él cerró la puerta.
Raimundo dejó las bombonas en el suelo y con la respiración entrecortada se dirigió a ella:
-Hoy tengo prisa, es viernes y “he quedao”
-Venga guapo, ¿no piensas dedicarme un ratito?
-Que no, que no, me las “piro”
-Venga te “pago” las bombonas y luego te vas…
-Me las pagas pero con euros
Ella ya le había metido la mano entre las piernas, le agarró tan fuerte que él se tuvo que doblar hacia delante y mirándola de reojo contestó:
-Si te pones así… tendré que quedarme, pero antes, llámame como a mí me gusta
-Claro, Señor Mingo
y dijo él- por el culo te la hinco
Los dos soltaron grandes carcajadas y comenzaron su juego que más que sexual era vicioso y primitivo.
Rodaron por el suelo sin mirar donde caían, lamiéndose y mordiéndose, inundados por el sudor producido por la excitación, fue tal su entrega que la mujer, en un momento de locura abrió sus brazos y sin querer, tiró el cenicero que adornaba una mesita auxiliar, con tan mala suerte que fue a parar a la frente de Raimundo, provocándole una brecha que comenzó a manar sangre a borbotones.
-ME ¡¡CAGüEN!!,LOURDES,¡¡JODER!!- gritó
-¡¡AY!! Lo siento, ay por Dios, ¿que te he hecho?- decía Lourdes echándose las manos a la cabeza
-DEJAME,¡¡DEJAME!!
-Ven que te ayude a levantarte y déjame que te cure
-¡¡No me toques!!
Lourdes, lloriqueando, fue al cuarto de baño a coger el botiquín, iba nerviosa, alterada y al abrir el cajón lo tiró todo al suelo. Seguía lloriqueando y oía a Raimundo gritar “será patosa la tía”, cosa que la ponía más nerviosa. Poco a poco consiguió recoger todo lo del botiquín, se dirigió al salón, Raimundo se encontraba sentado en el sillón y mantenía un paño de cocina tapando su frente, Lourdes toda nerviosa comenzó a preparar el esparadrapo y el algodón. Raimundo no dejaba de soltar adjetivos por su boca, Lourdes se dispuso a cortar un trozo de esparadrapo y él gritó “tan grande no, mujer” ella se asustó y las tijeras salieron volando clavándose en la pierna de Raimundo. Este saltó y tiró todo lo que estaba encima de la mesa, chillaba, se movía, ella lloraba pidiendo perdón, él se quito las tijeras de la pierna y salió dirección a la puerta, ella fue detrás suplicando que no se marchara, con la puerta de la escalera abierta. Lourdes le sujetó por el brazo pidiéndole que se tranquilizara, Raimundo en el intento de soltarse hizo un envite hacia atrás lo cual le provoco perder el equilibrio y caer escalaras abajo.
Raimundo despertó en el hospital, tumbado en una cama, tenía una pierna escayolada, collarín y todo el cuerpo vendado, aún no dando crédito de lo que le había ocurrido, se abrió la puerta de la habitación y aparecieron sus buenos amigos, se agruparon alrededor de la cama y a carcajada limpia le preguntaron:
-¿Qué tal estás, “tronco”?...JA,JA,JA
Raimundo miraba el parte de entregas del día, después de repasarlo, se lo guardó en el bolsillo y se dirigió a coger las dos bombonas que tenía que entregar, una se la echó al hombro y la otra la agarró con su mano izquierda; con paso rápido fue hacia el portal; al llegar soltó la bombona y llamó al timbre del 2º-izq.
-Sí –le contestaron
-El butanero –dijo
Se oyó el timbre de apertura de la puerta, entró y subió las escaleras; no había ascensor. Cuando llegó en el rellano le esperaba una mujer rubia con bata de seda azul, fumaba un cigarro, muy maquillada y, con sonrisa lasciva, le miró de arriba abajo y con el dedo le indicó que pasara, tras él cerró la puerta.
Raimundo dejó las bombonas en el suelo y con la respiración entrecortada se dirigió a ella:
-Hoy tengo prisa, es viernes y “he quedao”
-Venga guapo, ¿no piensas dedicarme un ratito?
-Que no, que no, me las “piro”
-Venga te “pago” las bombonas y luego te vas…
-Me las pagas pero con euros
Ella ya le había metido la mano entre las piernas, le agarró tan fuerte que él se tuvo que doblar hacia delante y mirándola de reojo contestó:
-Si te pones así… tendré que quedarme, pero antes, llámame como a mí me gusta
-Claro, Señor Mingo
y dijo él- por el culo te la hinco
Los dos soltaron grandes carcajadas y comenzaron su juego que más que sexual era vicioso y primitivo.
Rodaron por el suelo sin mirar donde caían, lamiéndose y mordiéndose, inundados por el sudor producido por la excitación, fue tal su entrega que la mujer, en un momento de locura abrió sus brazos y sin querer, tiró el cenicero que adornaba una mesita auxiliar, con tan mala suerte que fue a parar a la frente de Raimundo, provocándole una brecha que comenzó a manar sangre a borbotones.
-ME ¡¡CAGüEN!!,LOURDES,¡¡JODER!!- gritó
-¡¡AY!! Lo siento, ay por Dios, ¿que te he hecho?- decía Lourdes echándose las manos a la cabeza
-DEJAME,¡¡DEJAME!!
-Ven que te ayude a levantarte y déjame que te cure
-¡¡No me toques!!
Lourdes, lloriqueando, fue al cuarto de baño a coger el botiquín, iba nerviosa, alterada y al abrir el cajón lo tiró todo al suelo. Seguía lloriqueando y oía a Raimundo gritar “será patosa la tía”, cosa que la ponía más nerviosa. Poco a poco consiguió recoger todo lo del botiquín, se dirigió al salón, Raimundo se encontraba sentado en el sillón y mantenía un paño de cocina tapando su frente, Lourdes toda nerviosa comenzó a preparar el esparadrapo y el algodón. Raimundo no dejaba de soltar adjetivos por su boca, Lourdes se dispuso a cortar un trozo de esparadrapo y él gritó “tan grande no, mujer” ella se asustó y las tijeras salieron volando clavándose en la pierna de Raimundo. Este saltó y tiró todo lo que estaba encima de la mesa, chillaba, se movía, ella lloraba pidiendo perdón, él se quito las tijeras de la pierna y salió dirección a la puerta, ella fue detrás suplicando que no se marchara, con la puerta de la escalera abierta. Lourdes le sujetó por el brazo pidiéndole que se tranquilizara, Raimundo en el intento de soltarse hizo un envite hacia atrás lo cual le provoco perder el equilibrio y caer escalaras abajo.
Raimundo despertó en el hospital, tumbado en una cama, tenía una pierna escayolada, collarín y todo el cuerpo vendado, aún no dando crédito de lo que le había ocurrido, se abrió la puerta de la habitación y aparecieron sus buenos amigos, se agruparon alrededor de la cama y a carcajada limpia le preguntaron:
-¿Qué tal estás, “tronco”?...JA,JA,JA
miércoles, 20 de febrero de 2008
CALLE CAMINO DEL ÁNGEL
C/ CAMINO DEL ÁNGEL
“Nunca había sido tan oscura la noche, la Luna detrás de la cortina de nubes, no daba luz alguna.
El viento producía un silbido largo, las hojas de los árboles acompasaban su canto y entre ellos solo se oían los pasos rápidos y descompensados de la mujer que bajaba la calle; iba abrazada a su propio cuerpo, su cabeza casi clavada en su pecho no dejaba ver su rostro, en una de sus manos portaba un llavero.
De repente, se paro como si hubiera escuchado algo, miro hacía los lados y busco refugio detrás de un árbol, unas lágrimas caían por su cara, su respiración alterada hacía mover violentamente su pecho.
Calle arriba, un hombre bajaba por la misma acera, lo observo y su llanto se hizo más ahogado.
Al llegar el hombre a su altura, ella salió de su escondite cortándole el paso.
Él quedo parado.
-¿que haces aquí? –pregunto él
Con voz entrecortada ella contestó:
-ser testigo de tu traición.
Él alzo la cabeza y con ímpetu la agarró del brazo.
-¡vamos a casa!, allí hablaremos.
-¡suéltame! –grito ella –no iré contigo a ningún sitio
-¡vamos a casa he dicho!
De un manotazo la quito las llaves.
-venga sube a mi coche.
-¡no me toques!, dame las llaves.
Comenzó un forcejeo entre los dos; en la faz de ella se dibujaba la rabia, en la de él, el desconcierto.
En un momento del enfrentamiento ella consiguió desembarazarse de él con un empujón en su pecho; él, perdió el equilibrio y cayó hacía atrás, su cabeza choco contra el alerón de un coche y reboto en el filo de la acera, enseguida la sangre regó la calle tiñéndola de rojo.
El cuerpo se convulsiono, mientras ella le miraba impasible.
Despacio se agacho y arrebato el llavero de sus manos; con ellas apretadas en su pecho balbuceo estas palabras:
-“No solo cojo mis llaves, sino también mi libertad, descubierta la traición ya puedo abrir la puerta de mi alma y volar feliz y libre como un pájaro, vuelve al infierno de donde saliste, Gabriel”.
Y cogiendo la cruz que colgaba del llavero la beso, y con un golpe seco la clavo en el pecho del hombre allí inerte.
Los ojos de él se abrieron desorbitados, una llamarada broto de su pecho y un grito desgarrador hizo concluir su incineración.
Ella levanto sus brazos en cruz y unas alas nacieron de su espalda y en un vuelo vertical desapareció en el cielo, dejando un camino de luz a su paso”.
-Eso no hay quien se lo crea- dijo Isabel
- Es la leyenda de esta calle, de hay su nombre, c/ camino del ángel
-Como leyenda, vale- dijo Isabel sonriendo- brindemos por el ángel
-Y por el demonio- contesto su compañero
Isabel le observo con gesto serio.
-Vale, no te llevare la contraria nada más conocerte
-Chin, chin…- brindo él
-¿Cómo dijiste que te llamabas?- le pregunto Isabel
-Gabriel, me llamo Gabriel
-Por ti Gabriel- levanto su copa Isabel
Gabriel brindo con una gran sonrisa dibujada en su cara y en la parte trasera de su pantalón un apéndice casi imperceptible se movió contento de un lado a otro.
“Nunca había sido tan oscura la noche, la Luna detrás de la cortina de nubes, no daba luz alguna.
El viento producía un silbido largo, las hojas de los árboles acompasaban su canto y entre ellos solo se oían los pasos rápidos y descompensados de la mujer que bajaba la calle; iba abrazada a su propio cuerpo, su cabeza casi clavada en su pecho no dejaba ver su rostro, en una de sus manos portaba un llavero.
De repente, se paro como si hubiera escuchado algo, miro hacía los lados y busco refugio detrás de un árbol, unas lágrimas caían por su cara, su respiración alterada hacía mover violentamente su pecho.
Calle arriba, un hombre bajaba por la misma acera, lo observo y su llanto se hizo más ahogado.
Al llegar el hombre a su altura, ella salió de su escondite cortándole el paso.
Él quedo parado.
-¿que haces aquí? –pregunto él
Con voz entrecortada ella contestó:
-ser testigo de tu traición.
Él alzo la cabeza y con ímpetu la agarró del brazo.
-¡vamos a casa!, allí hablaremos.
-¡suéltame! –grito ella –no iré contigo a ningún sitio
-¡vamos a casa he dicho!
De un manotazo la quito las llaves.
-venga sube a mi coche.
-¡no me toques!, dame las llaves.
Comenzó un forcejeo entre los dos; en la faz de ella se dibujaba la rabia, en la de él, el desconcierto.
En un momento del enfrentamiento ella consiguió desembarazarse de él con un empujón en su pecho; él, perdió el equilibrio y cayó hacía atrás, su cabeza choco contra el alerón de un coche y reboto en el filo de la acera, enseguida la sangre regó la calle tiñéndola de rojo.
El cuerpo se convulsiono, mientras ella le miraba impasible.
Despacio se agacho y arrebato el llavero de sus manos; con ellas apretadas en su pecho balbuceo estas palabras:
-“No solo cojo mis llaves, sino también mi libertad, descubierta la traición ya puedo abrir la puerta de mi alma y volar feliz y libre como un pájaro, vuelve al infierno de donde saliste, Gabriel”.
Y cogiendo la cruz que colgaba del llavero la beso, y con un golpe seco la clavo en el pecho del hombre allí inerte.
Los ojos de él se abrieron desorbitados, una llamarada broto de su pecho y un grito desgarrador hizo concluir su incineración.
Ella levanto sus brazos en cruz y unas alas nacieron de su espalda y en un vuelo vertical desapareció en el cielo, dejando un camino de luz a su paso”.
-Eso no hay quien se lo crea- dijo Isabel
- Es la leyenda de esta calle, de hay su nombre, c/ camino del ángel
-Como leyenda, vale- dijo Isabel sonriendo- brindemos por el ángel
-Y por el demonio- contesto su compañero
Isabel le observo con gesto serio.
-Vale, no te llevare la contraria nada más conocerte
-Chin, chin…- brindo él
-¿Cómo dijiste que te llamabas?- le pregunto Isabel
-Gabriel, me llamo Gabriel
-Por ti Gabriel- levanto su copa Isabel
Gabriel brindo con una gran sonrisa dibujada en su cara y en la parte trasera de su pantalón un apéndice casi imperceptible se movió contento de un lado a otro.
viernes, 25 de enero de 2008
“AUTOENGAÑO”
(ENTRE LA REALIDAD Y LA FANTASIA)
Ya no es igual, la Plaza a cambiado, ya no lleva su vestido de flores, está desnuda, fresca y descarada, los árboles no lanzan sus ramas largas, verdes y tupidas, que daban sombra a niños y ancianos, han caído sus hojas, yacen en el suelo, unas encima de otras, como si quisieran abrazarse.
Las flores se han marchitado ante el frío, quedan unas ramas pobres y delgadas, como hombres de guerra, que esperan con paciencia obligada tiempos de prosperidad. Los bancos descansan, sienten el silencio de las calles vacías, no hay ancianos que descansen en ellos, ni les cuenten sus recuerdos.
Llueve, dulce lluvia, llegan tiempos de reflexión, el agua moja las hojas, la luz de las farolas las hacen brillar, parecen lentejuelas en un vestido de otoño.
Comienza la nueva estación, cada año es así, pero este año es distinta (…) me he enamorado, he encontrado el amor.
Creí que la vida ya no guardaba nada para mí, pero apareció él, dándome compañía, casa, estabilidad, cariño (…)
Me siento tan halagada, no podía ni imaginar que un hombre como él, pudiera fijarse en mí; no soy atractiva, mis facciones son duras, mi miopía demasiado visible, bajita, no tengo pechos, ni curva en mi cuerpo que incite al deseo… pero se fijó en mí, él un hombre fuerte, cuidado, con un alto nivel económico…
-¡Ana¡
-Estoy en la terraza, ahora voy Antonio
-Tu y tus tonterías, ven a la cama, sabes que no me gusta esperar
-Ya voy Antonio, ya voy…
Luna, hoy estás entera y clara, tú me entiendes, es un buen hombre, un poco brusco, quizás, ¿que grita? si, algunas veces, pero son sus nervios, trabaja mucho, algunas veces se le va la mano, pero él es el primero que lo siente, además es culpa mía, no debería de ser tan torpe, cometo muchos fallos y sin embargo luego me hace unos regalos preciosos(…) el último fue un anillo con pendientes a juego, dijo que hacían juego con el color de mis ojos y que resaltaban mi sonrisa…
Debo irme, Antonio me espera, no encenderé la luz, no quiero despertarle, se habrá cansado de esperarme, espero que mañana no este enfadado.
Que difícil es andar a oscuras, quitare despacio el edredón, ¡como suena esta tela!, ¡que fría esta la cama¡ me acercaré a él siempre está ardiendo…
-¡Quítate¡ mira que eres imbécil, ya me has despertado, ¡vete de aquí¡
-Perdona, no quería despertarte, lo siento, ¡no me empujes¡
-He dicho que te vayas, me das asco, ¡siempre jodiendo¡
-Tranquilo, ¡no me des, ¡Dios, mío¡
-¡Toma imbécil, a ver si aprendes, me tienes harto¡, no te gusta tanto mirar a la calle, pues mira, mira,!mira¡,!mira¡
-Antonio, no, no me empujes, me vas a tirar, Antonio, por Dios, que me tiras, ¡suéltame, por favor¡me haces daño, me caigo!! Antoniooo, socorrooooo¡¡(…)
¿Qué ha pasado?... está oscuro, ¿dónde estoy?... ¿qué es esto?, son hojas, están mojadas, ¡es la Plaza ¿pero, que hago en mitad de la Plaza?, estoy descalza, no siento frío, ni miedo, me siento ligera, feliz, libre, ¡quiero bailar, reír, volar¡…
Aquella es mi ventana, ¡Antonio, Antonio¡ estoy aquí, ¿no me ves?, ¿dónde miras, estoy aquí?.
…Hay algo allí, parece un bulto,¡Dios mio! ¡es mi cuerpo¡ ya lo entiendo…
Esta vez te has pasado, se te fue la mano, esta bien Antonio,¡esta bien!, cada uno en su sitio, tu pudriéndote en tus miserias y yo libre de ti, nadaré con la lluvia, seguiré al viento y bailaré con las hojas.
No podrás más con mi ser, volaré viva aún en muerte y quedo en alma y no en cuerpo, porque en alma alimento y en cuerpo muero.
Aquí quedaré, comprobando que el horror que me hiciste pasar, te marque como hierro en la piel, que el miedo se aferre a ti como agua a la tierra, que la incertidumbre se apodere de tu descanso y que tu vida termine como se merece, en agonía.... Mientras yo, esperare vestida de otoño y cuando, donde tu estés llueva, esas serán mis lágrimas, si hay truenos, serán mis gritos, el viento será mi alma y las nubes la cola de mi vestido.
2006-01-23
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